¿Alguna vez has oído hablar de la regla del 80/20? Según esta regla, también conocida como Principio de Pareto, un 20% de lo que hacemos produce un 80% de los resultados.
Te explicamos cómo puedes aplicar el Principio de Pareto a tu estudio de oposición para aprovechar al máximo tu tiempo y esfuerzo.
¿Qué es el Principio de Pareto?
¿Alguna vez has oído hablar de la regla del 80/20? Según esta regla, también conocida como Principio de Pareto, un 20% de lo que hacemos produce un 80% de los resultados.
Te explicamos cómo puedes aplicar el Principio de Pareto a tu estudio de oposición para aprovechar al máximo tu tiempo y esfuerzo.
¿Cómo funciona?
Dado que una pequeña parte del esfuerzo aportará la mayoría de los resultados, es importante optimizarlo a través de herramientas de organización del tiempo o técnicas de estudio.
Imagina que existen 100 técnicas diferentes. Aplicando el Principio de Pareto, es probable que el 20% de esas técnicas (unas 20) sean las que te ayuden a aprender más rápido y retener mejor la información. Dos ejemplos pueden ser:
- Diagrama de Pareto: esta herramienta te permite visualizar gráficamente la distribución de las causas y consecuencias en un proceso.
- Matriz de Eisenhower: esta matriz te ayuda a clasificar tus tareas en función de su urgencia e importancia.
¿Cómo aplicar el Principio de Pareto en tu estudio de oposición?
1. Identifica las técnicas del 20%
Investiga y experimenta con diferentes técnicas de estudio, como pueden ser:
- Elaboración de mapas mentales: esta técnica te ayuda a visualizar y organizar la información de forma jerárquica, facilitando la comprensión y retención de conceptos.
- Fichas de estudio:las fichas de estudio son una herramienta útil para resumir información clave y repasar conceptos importantes.
- Reglas mnemotécnicas: herramientas que ayudan a memorizar datos cortos.
- Explicación a otra persona: explicar un tema a otra persona te ayuda a reforzar tu propio conocimiento y a identificar las áreas en las que necesitas mejorar.
- Resolución de exámenes de años anteriores: practicar con exámenes reales te ayuda a familiarizarte con el formato del examen y a identificar tus puntos fuertes y débiles.
De todas ellas, analiza cuáles te ayudan realmente a aprender más rápido y a retener mejor la información.
También puedes consultar a otros opositores para conocer qué técnicas concretas han empleado para este tipo de examen.
2. Enfócate en las técnicas del 20%
Dedica una parte importante de tu tiempo de estudio a utilizar estas técnicas, aplicándolas especialmente del modo en que resulte más efectivo en tu caso concreto.
Generalmente, combinar diferentes técnicas y aplicarlas al día a día ayuda a crear una rutina de estudio personalizada.
Destacar, por otro lado, que es igual de importante adaptar las técnicas a tu estilo de aprendizaje como a las características de cada tema. No es lo mismo estudiar la Constitución que Sistemas Operativos.
3. Monitoriza y ajusta
Evalúa periódicamente tu progreso y comprueba si las técnicas que estás utilizando te están ayudando a alcanzar tus objetivos. Como hemos comentado, influyen variables como:
- La naturaleza del temario.
- Técnicas de retención más útiles para cada persona.
- Tipo de examen.
Por ello, es importante hacer ajustes en la rutina de estudio cuando sea preciso.
Ejemplos de cómo aplicar el Principio de Pareto al estudio de una oposición
La regla del 80/20 no es completamente rígida, debe moldearse dependiendo de las circunstancias comentadas. Algunos casos de aplicación para el estudio de oposiciones pueden ser:
- Técnicas de lectura: identifica las técnicas de lectura que te ayuden a comprender mejor los textos y a retener más información. Por ejemplo, lectura activa, subrayado, elaboración de resúmenes, etc.
- Técnicas de memorización: identifica las técnicas de memorización que te ayuden a recordar fechas, datos, conceptos clave, etc. Por ejemplo, mnemotecnia, loci method, flashcards, etc.
- Técnicas de organización: identifica las técnicas de organización que te ayuden a gestionar tu tiempo y tus materiales de estudio de forma eficiente. Por ejemplo, calendarios, listas de tareas, mapas mentales, etc.
Beneficios de aplicar el Principio de Pareto
- Estudio más eficiente: al enfocarte en las técnicas más efectivas, podrás estudiar de forma más productiva y en menos tiempo.
- Aprendizaje más profundo: al utilizar las técnicas adecuadas, podrás comprender mejor los temas y retener la información a largo plazo.
- Menos estrés: al saber qué técnicas te funcionan mejor, te sentirás menos abrumado y estresado durante el estudio.
- Mejores resultados: al optimizar tu metodología de estudio, lograrás mejores resultados en los exámenes y en la oposición en general.