La Comisión Europea presenta un paquete de medidas para acelerar el despliegue de redes de gigabit en toda la Unión Europea. La Ley de Infraestructura Gigabit o GIA es un paso crucial para alcanzar los objetivos de la Década Digital de la UE, que busca garantizar el acceso a una conectividad rápida y fiable para todos los ciudadanos y empresas de aquí a 2030.
La GIA forma parte de un conjunto de iniciativas más amplio para impulsar la transformación digital de la UE. Entre otras medidas encontramos:
- WiFi4EU: financiación de puntos de acceso wifi gratuitos en comunidades locales.
- Redes 6G: inversión en investigación e innovación para desarrollar la próxima generación de redes móviles.
- Competencias digitales: formación y desarrollo de las habilidades digitales de la población europea.
Qué es la Ley de Infraestructuras del Gigabit
La GIA sustituye a la Directiva de Reducción de Costes de la Banda Ancha de 2014, modernizando el marco regulatorio para el despliegue de redes de gigabit. Sus principales objetivos son:
- Acelerar el despliegue de redes de gigabit: reducir los costes y las barreras administrativas para la instalación de fibra óptica.
- Promover la inversión en infraestructuras digitales: crear un entorno favorable para la inversión privada en redes de gigabit.
- Reducir la brecha digital: asegurar que todos los ciudadanos y empresas, independientemente de su ubicación, tengan acceso a una conectividad rápida y fiable.
Medidas de la GIA
Para alcanzar sus objetivos, la Ley de Infraestructuras del Gigabit incluye una serie de medidas, como:
- Simplificación de los permisos: se reduce la carga administrativa para los operadores de telecomunicaciones, agilizando la obtención de permisos y licencias.
- Uso compartido de infraestructuras: se fomenta el uso compartido de infraestructuras existentes, como postes y conductos, para optimizar recursos y reducir costes.
- Co-despliegue y coordinación de obras civiles: se facilita la colaboración entre operadores y administraciones públicas para la instalación simultánea de cables de fibra óptica, minimizando las interrupciones y acelerando la expansión de la banda ancha.
- Edificios preparados para el futuro: se exige que los nuevos edificios y aquellos que se sometan a reformas importantes estén equipados con infraestructura lista para la fibra óptica.
- Protección del medio ambiente: la GIA promueve el uso de tecnologías eficientes y la reutilización de infraestructuras para minimizar el impacto ambiental del despliegue de redes.
Beneficios de la Ley de Infraestructura del Gigabit
La demanda de conectividad de alta velocidad está creciendo exponencialmente, impulsada por la adopción de tecnologías como la nube, la inteligencia artificial, el Internet de las cosas y la realidad virtual. La GIA es una respuesta a esta necesidad y contribuirá a:
- Impulsar la economía digital: la conectividad gigabit es esencial para el crecimiento de las empresas y la creación de nuevos empleos.
- Mejorar la calidad de vida: la Ley de Infraestructuras del Gigabit facilitará el acceso a servicios públicos online, como la educación, la sanidad y la administración electrónica.
- Reforzar la cohesión social: la reducción de la brecha digital ayudará a reducir las desigualdades entre zonas rurales y urbanas.
