Estudiar para una oposición TIC exige horas de enfoque. Sin embargo, el entorno digital en el que vivimos está lleno de interrupciones: notificaciones, mensajes, alertas…
Por suerte, la propia tecnología ofrece herramientas para evitar distracciones durante el estudio y crear un entorno más productivo.
Cómo estudiar sin distracciones
Hoy en día, casi todos los sistemas operativos incorporan funciones pensadas para ayudarnos a desconectar del ruido digital y centrarnos en lo importante.
- En iOS, esta función se llama Concentración (Focus), y permite crear distintos modos personalizados (por ejemplo, uno de “Estudio” o “Trabajo”).
Dentro de las opciones de Tiempo de uso también puedes ver estadísticas, establecer límites y controlar tus hábitos digitales.
- En el caso de Android, estas herramientas se agrupan en Bienestar digital, que incluye el Modo concentración para pausar aplicaciones que distraen, y No molestar, para silenciar notificaciones y llamadas.
- Por su parte, Windows ofrece la Sesión de concentración (en la app Reloj), ideal para trabajar o estudiar por bloques de tiempo, junto al clásico Asistente de concentración para mantener el silencio mientras te concentras.
Estas herramientas permiten:
- Bloquear temporalmente apps y notificaciones no relacionadas con el estudio.
- Programar horarios y automatizaciones según tu rutina (por tiempo, ubicación o al abrir una app, según el sistema).
- Restringir comunicaciones a contactos o aplicaciones esenciales mediante las listas permitidas (whitelists) o “No molestar”.
Consejo práctico: un pequeño gesto como activar tu modo concentración antes de cada bloque de estudio puede marcar una gran diferencia: te ayuda a entrar antes en “modo oposición” y mantener la atención sin interrupciones externas.
Por qué funciona: la ciencia detrás de la concentración
Desde la psicología cognitiva, se sabe que cada distracción interrumpe el flujo de trabajo y puede tardarse varios minutos en recuperar el nivel de atención previo. El modo concentración reduce la carga cognitiva provocada por los estímulos digitales, permitiendo al cerebro entrar en un estado de “foco sostenido”.
Además, utilizar estas herramientas refuerza un hábito clave: asociar ciertos entornos o rutinas digitales con el momento de estudio, lo que mejora la autodisciplina a largo plazo.
Aplicaciones para estudiar sin distracciones
Más allá de las funciones que traen los dispositivos, hay aplicaciones que pueden convertirse en grandes aliadas para quienes estudian una oposición y quieren aprovechar mejor su tiempo:
- Forest convierte la concentración en algo visual: mientras te mantienes enfocado, crece un árbol virtual. Además, con su extensión puedes bloquear webs y reducir tentaciones digitales.
- Freedom: permite bloquear webs y apps y sincronizar los bloqueos en todos tus dispositivos, ideal para mantener la coherencia entre móvil y ordenador.
- Pomofocus: ofrece un temporizador Pomodoro sencillo y efectivo para alternar fases de concentración y descanso.
- Focus To-Do: combina la técnica Pomodoro con la gestión de tareas. Si además quieres añadir bloqueo de distracciones, puedes complementarla con una app específica para ello.
Claves prácticas para opositores TIC
Para aprovechar al máximo estas herramientas digitales:
- Planifica tus bloques de estudio y activa el modo concentración antes de cada sesión.
- Silencia notificaciones incluso en apps de mensajería o correo profesional, salvo casos urgentes.
- Configura descansos programados para revisar mensajes o redes sin culpa ni interrupciones.
- Evalúa cada semana si las herramientas empleadas te ayudan realmente a mantener el foco o necesitas ajustar la configuración.
Adoptar un “modo concentración” digital no solo mejora la productividad, sino que entrena la atención sostenida, una competencia esencial para afrontar con éxito la preparación TIC.