El Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE) ha presentado su Balance de Ciberseguridad para el año 2023, donde se pone de manifiesto un preocupante aumento del 24% en los incidentes gestionados en comparación con el año anterior. Un total de 83.517 ataques informáticos fueron atendidos por el CERT de INCIBE, cifra que refleja la creciente sofisticación y virulencia de las ciberamenazas en el panorama digital actual.
Usuarios y empresas, los principales objetivos
Más de la mitad de los incidentes registrados (58.000) afectaron a usuarios de internet particulares, mientras que el sector empresarial sufrió 22.000 ataques. Entre las empresas afectadas se encuentran pymes, micropymes y autónomos, un sector especialmente vulnerable ante este tipo de amenazas.
Los ataques informáticos no solo causaron molestias a los usuarios, sino que en muchos casos tuvieron consecuencias graves. Más de 9.000 dispositivos quedaron inutilizados, mientras que se registraron 28.000 casos de fraude y se detectaron más de 7.000 páginas web con contenido abusivo, que fueron retiradas de la red.
Sectores esenciales, bajo la mira de los cibercriminales
Los cibercriminales no dudaron en atacar sectores críticos para la sociedad, como son:
- El financiero y tributario (25,42%.
- El transporte (25%).
- La energía (22,08%).
- Las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC) (18,33%).
- El sector del agua (4,58%).
Estos ataques ponen en riesgo el funcionamiento de infraestructuras esenciales y pueden tener un impacto devastador en la vida de los ciudadanos.
Instituciones educativas y sanitarias, también afectadas
Las universidades, instituciones sanitarias y otras entidades de la RedIRIS también fueron blanco de ataques informáticos, con un total de 1.673 incidentes registrados. La protección de datos sensibles y la continuidad de los servicios en estos sectores son de vital importancia, por lo que es necesario reforzar las medidas de seguridad en este ámbito.
Un panorama que exige un compromiso conjunto
Las cifras del Balance de Ciberseguridad de INCIBE ponen de relieve la necesidad de un compromiso conjunto para hacer frente a las ciberamenazas. Es fundamental que tanto usuarios como empresas y administraciones públicas adopten medidas de seguridad adecuadas para protegerse de los ciberataques. La concienciación, la formación y la colaboración son claves para construir un ecosistema digital más seguro y resiliente.